La concepción y las actitudes
existentes en nuestro entorno con relación al conflicto determinan
negativamente nuestro comportamiento en las situaciones conflictivas.
Existen varias formas de
distinguir un conflicto del otro, no se habla de encasillar el mismo pero es
importante clasificarlo en alguna tipología.
A continuación mencionaremos
las diferentes tipologías de los conflictos:
1. Por
naturaleza de violencia
v Vertical: distintas
jerarquías quiere decir que es el que ocurre entre
organizaciones que trabajan juntas para proveer el mismo producto al
consumidor.
v Horizontal: En
un mismo nivel de jerarquía es el que tiene lugar entre compañías situadas en
un mismo nivel de distribución. Puede darse básicamente entre: Intermediarios
del mismo tipo entre detallistas independientes.
2. Por
método de manejo
v Disociativo: Es
en el que las partes quieren complicar es un mecanismo psicológico de defensa
en el cual la identidad, memoria, ideas, sentimientos o percepciones propias se
encuentran separadas del conocimiento consciente y no pueden ser recuperadas o
experimentadas voluntariamente.
v Asociativos: existe
un equilibrio en las metas.
3. Por el
manejo o la forma en que se afrontan
v Luchas: el
conflicto es por la fuerza sin ningún tipo de estrategia.
v Juegos: se
puede desarrollar por medio de tácticas.
v Debates: el
conflicto se desarrolla por la legitimación o argumentos válidos.
4. Por
la clase del problema
v Sustantivos: Tiene
que ver con interés materiales se orienta más a las tareas, concentrándose en
las formas creadoras de definir las funciones, en reestructuraciones,
reingenierías, entre otras.
v Sentimentales: Dentro
del conflicto está de por medio el afecto, se trata de problemas relacionados
con la desconfianza, ira, desprecio y temor. Requiere reestructuración de
percepciones, examen y tratamiento de sentimientos.
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